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El Triángulo Dramático: cuando las relaciones son disfuncionales
La teoría del triángulo dramático es un modelo que explica las interacciones humanas en base a tres roles que solemos escoger ante relaciones conflictivas y disfuncionales.
Meterte en uno de estos roles no ayuda a resolver la situación, más bien nos estanca en patrones repetitivos y limitantes sobre nuestra autoestima y nuestras relaciones, ya que al adoptar un rol es probable que encontremos otra persona que desempeñe el rol complementario y nos metamos en una interacción destructiva.
Veamos los tres roles: Víctima, Salvador y Perseguidor
Rol de Víctima
Conocido como niño herido. Postura infantil que hace sentirte indefenso y vulnerable, por lo que pueden tender a relaciones codependientes. Aparentemente buscan ayuda, pero suelen evitar responsabilizarse de sus dificultades, lo que genera frustración en los demás. Pueden tomar actitudes pasivo agresivas cuando no se les ayuda como consideran. Debido a que los perseguidores señalan sus defectos y los salvadores no fomentan su autonomía, suelen verse inútiles y con baja autoestima.
Rol de Perseguidor
Conocido como el juez interno. Critica, juzga, culpa, humilla, ataca, amenaza, insulta. Se atribuye el derecho a cambiar a los demás y lo exige. Busca víctimas en las que ejercer ese control y salvadores para excluir sus culpas. No admite vulnerabilidades ni defectos propios.
Rol de Salvador
Conocido como Mártir o héroe. Complacientes, anteponen y se responsabilizan de las necesidades de los demás a las suyas. Huye de los conflictos y asumen culpas externas. Paternalista, se aferra a víctimas para cuidarlas y sobreprotegerlas. Sienten que sólo merecen cariño si son serviciales y buenas personas. No expresan necesidades propias.
¿Cómo salir de este círculo vicioso?
- Observa tus propios pensamientos e interacciones sin juicio para tener conciencia de cómo uno representa estos roles y de cómo los demás intentan engancharte al triángulo.
- Sé honesto contigo mismo para desprenderte de la vergüenza, culpa y victimismo.
- Recuerda que es una teoría psicológica para explicar círculos viciosos que se repiten una y otra vez, y que no tiene que ver con el asertividad, el sufrimiento con sentido y la responsabilidad sana con los demás. Tienes derecho a que te afecten cuestiones del mundo exterior, a defenderte y a sentirse parte de una relación bien tratante que ayuda al crecimiento personal mutuo.
¿Por qué el Triángulo Dramático en Psicoterapia?
Porque nos permite comprender muchas dinámicas relacionales que se nos presentan en consulta, y hacer consciente a la persona que se encuentra sumergida en su propio triángulo dramático que puede adoptar un rol diferente. Por eso lo consideramos una formación complementaria y necesaria de nuestro equipo de psicólogos, ya que sin él no podríamos centrar las intervenciones psicoterapéuticas de una manera eficaz.